“Una persona normal, absolutamente normal”, responde raudo cuando le preguntan quién es Unai Rementeria Maiz (Mundaka, 10-8-1973). Abogado economista por la Universidad de Deusto, diplomado en Derecho Administrativo y Urbanístico, exalcalde de Mundaka, exparlamentario, actual diputado de Presidencia de la Diputación Foral de Bizkaia -de la que también es portavoz-, txistulari, socio del Athletic, casado y padre de dos hijos, Unai Rementeria pone nombre y apellidos a la propuesta que el Bizkai Buru Batzar ha efectuado para suceder a José Luis Bilbao como diputado general de Bizkaia.

Pese a su amplio bagaje profesional y político, Rementeria es conocido en Mundaka por ser el hijo de Mari Tere y, sobre todo, el sobrino de Sabina, toda una institución en el municipio costero que regentaba el bar Goikoa, en plena calle Mayor, donde también se vendían periódicos y revistas. Encargarse de la venta de esos periódicos en los veranos y servir cafés fue el primer empleo del actual diputado de Presidencia. “En mi casa no existían las vacaciones de verano; había que trabajar”, evoca. Todavía se emociona al recordar que su tía Sabina, “mi segunda madre”, murió “currando”. “Toda aquella gente que murió tan joven nunca tuvo vacaciones; en los pueblos el dinero se ha hecho trabajando muy duro”.

Inició su formación en la ikastola de Marilo Gaubeka (similar a una haurreskola de hoy), pero desde los seis años estudió en la ikastola de Bermeo porque en el colegio público de Mundaka la enseñanza era solo en castellano. Confiesa que siempre ha sido un estudiante aplicado a quien de niño le gustaba ver las noticias económicas en televisión. “Fue mi tía quien me animó a ser abogado. Y aunque abogado por sí solo no me gustaba mucho, la especialidad de abogado economista sí me sedujo. Tampoco me desagradaban el urbanismo y la arquitectura”. A los 18 años se trasladó a vivir a Bilbao para estudiar en la Universidad de Deusto. El primer año de carrera vivió en un piso de una señora que alquilaba habitaciones, en la deustuarra calle Luzarra; el segundo, en un piso de estudiantes. “Aprendes a limpiar, a hacer la comida y, sobre todo, a respetar. La convivencia es muy dura. En esa época me hice un experto en ensaladas y tortillas. Eso sí, cuando llegaba el viernes marchaba para Mundaka como un cohete. La universidad y el piso me lo pagaban entre mi madre y mi tía con lo que sacaban del bar; y también mi tío Pedro, que era soltero y explotaba la gasolinera de Bermeo, y mi hermano Josu (dos años mayor)”. El de gasolinero fue otro de los trabajos temporales de Rementeria en su juventud.

Alumno de Arzalluz, Lidón, Erkoreka o Zulueta

En la Universidad de Deusto tuvo como profesores a Xabier Arzalluz, José María Lidón (que le mandó a setiembre con Derecho Penal), Josu Erkoreka (portavoz del Gobierno vasco), Juan Churruca (consejero de Educación, Universidades e Investigación en el primer Gobierno vasco del lehendakari Ardanza), la tía de Antonio Basagoiti o César González de Heredia, que actualmente es su director de Función Pública en la Diputación Foral de Bizkaia. En clase conoció a Saioa, su mujer, también abogada. Tras terminar la universidad, a la espera de encontrar su primer trabajo, estudió inglés y francés (habla y escribe en castellano, euskera e inglés). También cursó un máster IVAP de Derecho Administrativo, con prácticas en el Ayuntamiento de Amorebieta-Etxano, y otro de Práctica Jurídica en el Colegio de Abogados de Bizkaia (Arantza Zulueta, hoy en prisión, fue una de sus profesoras), con prácticas en la oficina de consumo del Ayuntamiento de Bermeo. A punto de terminar estas prácticas, se presentó al examen para secretario-interventor del Ayuntamiento de Nabarniz (gobernado por EH Bildu y con cuyo alcalde y algunos concejales todavía guarda muy buena relación) y sacó la plaza de funcionario interino con perfil 4 en mayo de 1999.

Su currículum refleja ocho años de experiencia en el sector privado. Rementeria ejerció como letrado de Derecho Administrativo en el bufete Sanz & Saiz Abogados (1999-2002) y después en el bufete Ibarrondo & Lamikiz, como abogado especialista en Derecho Administrativo (2002-2007). “Hubiera tenido un futuro brillante como abogado, pero la vocación política pudo más que la profesión”, opina Fernando Lamikiz, socio fundador de este bufete y jefe de Rementeria durante aquellos años. Entre 1999 y 2007 asesoró a varios ayuntamientos en materia de Urbanismo, Medio Ambiente y Derecho Administrativo. De 2007 a 2008 fue letrado del departamento jurídico de la empresa pública Euskal Trenbide Sarea (ETS) y en 2008 de la sociedad pública Bizkailur (hoy Azpiegiturak).

La política entró en sus venas gracias a otros dos mundakarras: Kepa Ormaetxea, Kepa Baba, y el cura Martintxu, actualmente de misiones en Ecuador. El primero, en su época de alcalde, juntó a una docena de jóvenes en torno a EGI y les organizó para hacer cosas por el pueblo como limpiar los montes, teatro, música... “Para mí han sido dos referentes porque eran gente que aportaba compromiso por el pueblo sin recibir nada a cambio. A mí la política me gana por el pueblo, por intentar mejorar tu pueblo. He tenido la suerte de pasar por los tres parlamentos de mi país (ayuntamiento, Parlamento Vasco y Diputación) y más no puedo pedir. Cuando viene alguien a mi despacho con algún problema siempre digo lo mismo: no te digo que sí ni que no, solo te prometo que voy a intentarlo”. Su cercanía a las familias de los marineros del atunero Alakrana, secuestrado por piratas en octubre de 2009 durante 47 días frente a la costa de Somalia, fue muy valorada en aquellos difíciles momentos.

Debut político como independiente

Su primera experiencia política de verdad llegó en 1999. Ese año integró la candidatura de EAJ-PNV de Mundaka en calidad de independiente (se afilió a la formación jeltzale en 2001). Fue concejal de Urbanismo y teniente alcalde de Mundaka desde 1999 a 2007. Ocupó la alcaldía desde 2007 hasta 2013. También fue miembro de la junta territorial de EUDEL (2007-2010). En abril de 2009 se estrenó como parlamentario en el Parlamento Vasco (hasta 2011) y solo desde entonces ha hecho de la política su profesión. En las elecciones municipales y forales de 2011 fue elegido juntero y designado portavoz del grupo de EAJ-PNV en las Juntas Generales de Bizkaia. Desde enero de 2013 es diputado de Presidencia y portavoz de la Diputación Foral de Bizkaia. Dentro de EAJ-PNV ha sido miembro de la Asamblea Nacional y del Bizkai Buru Batzar entre 2008 y 2012, presidido por Andoni Ortuzar, “mi gran referente político”.

Ha estado en primera línea, por su condición de responsable del sistema de emergencias y de bomberos de Bizkaia, en catástrofes como el incendio que arrasó buena parte del casco antiguo de Bermeo o en las últimas inundaciones que afectaron a diversos pueblos del territorio. La modernización y adecuación de los ayuntamientos de Bizkaia a la administración electrónica, la ley municipal, el impulso de políticas de transparencia en la Diputación o el saneamiento financiero de los consistorios vizcaínos han sido algunos de sus principales frentes políticos.

Música y surf, cara y cruz

Rementeria suele ver amanecer mientras practica running por Mundaka, cuna de la famosa ola izquierda. Pero en casa del herrero… “No saber hacer surf quizá es una de mis mayores frustraciones; si llego a nacer diez años más tarde y en vez de trabajar en el bar de la tía poniendo cafés hubiera podido dedicarle más tiempo... Yo no sé, pero me encantaría que mis hijos aprendieran”, confiesa este apasionado de la mar, a quien le encanta salir a navegar en las embarcaciones de los amigos y es socio de Mundaka Arraun Taldea y de Mundakako Atorrak. Precisamente la foto de una buena izquierda ilustra su Whatsapp y su Facebook (también utiliza Twitter, @urementeria). La música es otra de sus debilidades. Toca el txistu (adora a Pili Ruiz, Pili Txistu, “la persona que además de txistu nos enseñó principios y valores” -ahora enseña txistu a sus hijos-) y el clarinete y es un habitual de los pasacalles, aunque lamenta no poder ir a ensayar todo lo que le gustaría. Recientemente ha comprado un ukelele para salir en Aratusteak. “La música ayuda a evadirte y te sube la moral”, explica. En su lista musical de Spotify figura un abanico heterogéneo de grupos que va desde AC-DC, U2, Bruce Springsteen, Coldplay, The Uski’s o Ken Zazpi hasta Benito Lertxundi. Sin embargo, en su coche, un todoterreno de tercera mano, reinan las canciones de Txirri, Mirri eta Tixiribiton y de Pirritx eta Porrotx. “Ahí no hay nada que hacer, manda quien manda”, confiesa entre resignado y divertido. Amante de la lectura, especialmente de la novela histórica, tiene entre manos el best seller El Caballero de la armadura oxidada, del escritor estadounidense Robert Fisher. Su plato favorito es la merluza con begihaundis, “que en Mundaka la bordan”, y le pierde el queso. Para él un plan perfecto es estar con su familia, tomar una cervecita con los amigos en el pueblo, “pero sin alcohol”, o ver pelota a mano. “Una persona normal, absolutamente normal”, insiste.