Garbiñe Sáenz de Buruaga Garralda ha vuelto a tener el respaldo mayoritario de la Asamblea Municipal de EAJ-PNV en Ispaster, que se celebró el pasado 6 de julio. “Queremos que las vecinas y vecinos de Ispaster nos vuelvan a respaldar con sus votos y así seguir mejorando la calidad de vida y el bienestar de quienes viven en el municipio”, ha afirmado la candidata. De esta manera, afronta el reto “con ilusión y con ganas de seguir haciendo cosas importantes”. A la hora de trabajar destaca la importancia de la cercanía: “Es importante estar en la calle, escuchar las preocupaciones de los vecinos y vecinas, estar con las personas”.

Para la actual alcaldesa estos años de legislatura han sido positivos en muchos aspectos. “Hemos hecho  un esfuerzo importante para dotar de saneamiento las zonas de Barainka, Soluanes, Erkiaga y parte de Gallete. Además, estamos trabajando en pro de la eficiencia energética y la reducción de emisiones, con unas instalaciones que se han convertido en  referencia entre los municipios como el nuestro. Estamos mejorando y ampliando las instalaciones en el polideportivo y, para finalizar, hemos rehabilitado un edificio para convertirlo en casa de cultura con biblioteca, KZgunea, Gaztegune…”.

La candidata jeltzale también ha querido destacar otras tareas en las que le gustaría trabajar si obtuviera el respaldo de la ciudadanía: “Ampliar y renovar la escuela municipal, mejorar el transporte público para las personas usuarias del municipio, impulsar el desarrollo del polígono y mantener la calidad de los servicios conseguidos a nivel municipal”. Igualmente, incide en la gestión y el mantenimiento de aspectos básicos esenciales, como la limpieza de las zonas públicas y el mantenimiento del mobiliario y los caminos públicos: “Intentamos en el día a día que la calidad de vida de la gente vaya mejorando, es difícil llegar a todo, pero es un esfuerzo diario y continuo por nuestra parte”.

Garbiñe Sáenz de Buruaga Garralda tiene 52 años, está casada y es ama de dos hijas. También, es una apasionada de la montaña, sobre todo de las ‘mendi martxas’ que se organizan por los alrededores de Ispaster. “Tenemos un entorno envidiable, por eso salgo a pasear siempre que puedo. Cerca de Otoio, Kurtxia, la playa de Ogella… son parajes para desconectar”.