Entrevista a Iñaki Azkuna

"Es momento de pedir un sacrificio al ciudadano y habrá que subir impuestos"

Después de una semana frenética de fiestas, la primera comparecencia del Ayuntamiento de Bilbao es para presentar los impuestos y tasas municipales de 2012. El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, hace meses que viene advirtiendo de que habrá que tomar medidas serias, poco populares, pero está convencido de que es lo único que se puede hacer en estos momentos si se quiere evitar años de pobreza. Azkuna adelanta que habrá que subir impuestos, que alguno se bajará, se rebajarán subvenciones y no se podrán llevar a cabo algunos programas de las áreas municipales. Los barrios no se van a ver resentidos, ni servicios como la policía, los bomberos o los servicios sociales, pero -y lo dice de manera teórica-, sería posible que en lugar de recoger la basura durante los siete días de la semana, se hiciera solo seis.

No es la primera vez que advierte de que vienen tiempos difíciles. ¿De qué nos trata de prevenir?

No quiero amargar a nadie los primeros días de septiembre, pero soy de los que piensa que la situación de Europa y del Reino de España es muy delicada. Creo que la sociedad es lo suficientemente adulta como para decirle la verdad. No se le puede engañar, ni estar dándole un chupa-chups todos los días. Hay que decirle la verdad. Yo soy de los que prefiero tener un año y medio o dos durísimos, para luego poder salir hacia adelante. Y no que, por no tomar decisiones, nos pase como a Grecia, Irlanda o Portugal, cuya situación significa que les esperan 40 años de pobreza. Ayer, oía a una antigua campeona olímpica griega y diputada que decía que a ellos les han caído 40 años de pobreza. Si el Reino de España es rescatado, son 40 años de pobreza pagando deudas e intereses. Y todavía pagar deuda es una cosa, pero, además, pagar intereses es tremendo. Con lo que tuvimos que oír porque teníamos deuda cero...si de los 8.000 ayuntamientos del Reino hubiese 6.000 con deuda cero otro gallo cantaría. Hay ayuntamientos que lo van a pasar fatal. No van a poder dar los servicios normales. Nosotros también nos vamos a tener que ajustar y vamos a tener que tomar medidas serias.

¿A qué medidas se refiere? ¿Cómo pueden repercutir en los bilbainos?

Medidas serias. Tendremos que subir algún impuesto, intentaremos bajar también alguno. Vamos a trabajar en todo lo que sea intentar crear empleo. Pero, en transporte, deportes... habrá que subir un poco los impuestos, porque de lo contrario, nos arruinamos. Pero, a mí no me parece de recibo que en la situación que está el Estado, los dos grandes partidos estatales lleven tres años con el espectáculo que están dando, excepto aquí en Euskadi.

No es la primera vez que recrimina la actitud de los partidos estatales en la resolución de la crisis. ¿Qué cree que debían haber hecho?

Me parece algo vergonzante, porque llegan momentos en la vida en los que no tienes más remedio que ceder en tus pretensiones y sacar el barco hacia adelante. Es lo que, por ejemplo, ha hecho el PNV. No tenía ninguna necesidad de apoyar a Zapatero, pero ha sido responsable y serio. Y si el PNV no llega a sacar el presupuesto el año pasado, igual resulta que en estos momentos el Reino de España está rescatado y estamos sumidos en la pobreza. Por tanto, creo que es mejor hacer un ajuste duro con un acuerdo político que estar seis o siete años renqueando, sin tomar decisiones y muriéndonos de angustia. Tenemos cuatro millones de parados y es lo mismo tener 4,5 que 4,6. A esa gente, en este momento, no se le dan soluciones porque el Reino está endeudado hasta las cachas; las comunidades autónomas, los ayuntamientos... Pero es que está también endeudada la propiedad privada. Tenemos casi un millón de viviendas vacías. ¡Fíjese el capital que está metido ahí! Los bancos no pueden dar créditos porque, como decía el presidente de Banesto, tienen tanta morosidad que no pueden dar más créditos. Por eso, es mejor tomar decisiones; pero han sido incapaces de ponerse de acuerdo en cosas básicas como la salida de la crisis.

La situación de Bilbao con respecto al resto de los ayuntamientos es mejor, pero aun así también habrá que tomar medidas.

Nuestra situación es mejor porque no tenemos deuda. Y el año que viene tampoco nos vamos a endeudar, porque en este momento estamos haciendo los grandes proyectos de los cuatro años. El año que viene saldrá, pero no nos hará falta deuda hasta dentro de dos años. El próximo año vamos a procurar que el presupuesto sea casi de no respirar. Tendremos que rebajar algún servicio pero, en general, los servicios que da el Ayuntamiento: policías, bomberos, limpieza... se mantendrán. Puede ocurrir y, lo digo desde ahora, como una cosa teórica, que en vez de siete días a la semana de recogida de basura recojamos seis. Por ejemplo. Pero eso, es pecata minuta con lo que ya está pasando en algunos ayuntamientos del Estado, que llevan sin pagar a los policías y a los barrenderos y a los bomberos desde hace seis meses. Nosotros estamos mejor, pero no podemos descuidarnos. Porque es un paso muy fácil. Te pones chulo y tonto y la armas. Hay que hablar claramente a la ciudadanía y, si en algún momento había que pedir sacrificios a la ciudadanía, es ahora.

Pedir sacrificios a un parado...

Casi se me cae la cara de vergüenza, porque es tremendo. Además eso significa que no ingresan, lo pasan mal, tampoco hay seguridad social, además deben la hipoteca a los bancos...un desastre. Por eso digo yo que aquí, si en algún momento había que hacer un decálogo, no digo para arreglar, pero al menos para paliarla situación, es en este momento. Ahora dicen que se van a poner de acuerdo en el tema constitucional. Eso significa que reconocemos que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades y que además nos hemos creído que éramos de los diez países más ricos del mundo. Nos ha comido la vanidad y nos hemos creído los reyes del mambo.

¿Usted cree que los políticos no han sido responsables o quizás no han sabido estar a la altura de las circunstancias?

Ha habido de todo. Ha habido falta de decisión. Pero, por ejemplo, Zapatero gastó miles de millones en la época de Solbes cuando ya se veía venir el lobo y todavía seguía haciendo promesas y derrochando dinero. Ahí había que haber tomado acuerdos como nosotros tomamos en 2009. Entonces rebajamos el presupuesto a 36 millones de euros.

Ahora que van a negociar ustedes el presupuesto, ¿cree que los partidos en el Ayuntamiento van a apoyar las subidas que propongan o, como en los últimos años, seguirán pidiendo una subida e, incluso, que se rebajen impuestos?

Yo tengo que ser responsable. Los bilbainos me han dado la mayoría absoluta para que sea responsable. Les voy a decir la verdad. Que la situación es delicada y que no quiero que el Ayuntamiento de Bilbao arrastre penalidades los próximos 30 años; que por hacer una calle más o poner cuatro farolas esté debiendo a todo el mundo y arrastrando las miserias que se tengan.

Son medidas impopulares, ¿cree que las va a entender la ciudadanía?

Las tiene que entender. Si no lo entiende ahora, no lo va a entender nunca. Lo que no va a entender la ciudadanía es que, en momentos de esplendor económico, empieces a quitar cosas. Pero, ahora, sabe que la situación es complicada. Y si no lo sabe del todo, la culpa es nuestra porque no se lo hemos explicado bien.

¿Qué otras decisiones se van a adoptar en esta situación de crisis?

Todas las áreas del Ayuntamiento van a tener que retrasar sus programas. Y habrá programas que no se van a poder cumplir. Cada uno tendrá que saber dónde puede bajar el pistón. Las subvenciones, por ejemplo, se pueden dar en época de bonanza. Hay programas que no son vitales para la villa. Otros que sí, como el tema de educación, el tema social... pero bajaremos las inversiones. No vamos a poder mantener el ritmo que teníamos hasta ahora. Ni tampoco vamos a hacer otra Alhóndiga.

¿Se van a ver afectados los barrios?

Vamos a mantener el ritmo de los barrios y su inversión. Los barrios tienen que seguir mejorando en Bilbao.