“La Constitución Española está secuestrada, cuestionada e incumplida. Y está en crisis en varios apartados: estatus del jefe Estado, elección del poder ejecutivo, capacidad del legislativo, elección del judicial… y también en lo referente a la cuestión nacional vasca y catalana”. Con estas palabras ha descrito Aitor Esteban, portavoz del Grupo Vasco en el Congreso de los Diputados, la situación en la que se encuentra la llamada ‘Carta Magna’ el día en el que se cumplen 42 años de su aprobación. Un estado precario que, en palabras del dirigente jeltzale, se debe a la “muy particular interpretación que los partidos que se dicen ‘constitucionalistas’ hacen de la misma, negando legitimidad institucional a quienes la interpretamos de otra manera y utilizándola más como un tapón o como un instrumento de defensa para hacer realidad su visión ideológica, y no para llegar acuerdos con los demás”.

Esteban ha ofrecido hoy una rueda de prensa en Sabin Etxea en la que ha recordado que el 6 de diciembre de 1978 “el censo en Euskadi mayoritariamente no apoyó la Constitución, y aquellas reticencias y aquel distanciamiento con respecto a la Constitución siguen hoy siendo mayoritarios entre la ciudadanía vasca”. Asimismo, ha denunciado que “el Estatuto de Gernika, que de alguna manera completa a la propia Constitución, no se cumple, y aún hoy seguimos discutiendo en torno a una serie de competencias que faltan para que sea completado”. El portavoz abertzale ha asegurado que la crisis constitucional afecta a los principales estamentos del Estado español, desde su Jefatura hasta el poder judicial, pasando por el ejecutivo y el legislativo, e incluye también las aún irresueltas cuestiones nacionales vasca y catalana.

En cuanto a la jefatura del Estado, Esteban ha asegurado que “la inviolabilidad del jefe del Estado tiene hoy menos sentido que nunca. Si ya no se entiende ‘per se’ que al Rey no se le pueda llevar ante los tribunales pase lo que pase, los últimos datos conocidos hacen más urgente que la Constitución sea modificada”. Asimismo, el portavoz jeltzale ha instado a Felipe VI a dar “cumplida contestación” a las comprometedoras cartas que le han sido remitidas desde el ámbito militar. “No hay duda entre la ciudadanía de que en el Ejército español este tipo de actitudes, pensamientos e interpretaciones limitadas de la Constitución existen y son prevalentes. Por eso el propio Jefe del Estado debería ser el primero en dar cumplida contestación a estas cartas, porque su silencio se puede malinterpretar desde un lado y desde el otro. Que diga qué piensa de estas cartas. Que deje claros los límites que se intentan traspasar desde fuera del ámbito democrático. Debería hablar claro, su silencio no ayuda a la Constitución que dice defender”, ha afirmado.