Erruki Goiriena Irastorza concurre por primera vez como cabeza de lista de EAJ-PNV en Sukarrieta en las próximas elecciones municipales. Lo hace como “un nuevo desafío y responsabilidad” y con el objetivo de devolver al municipio “la ilusión” y “su identidad propia”. En esta línea, asegura que “es fundamental seguir luchando por todas las vías legales para defender la integridad y la historia del municipio”.

La actual alcaldesa, quien está al frente del Consistorio costero desde el fallecimiento del anterior alcalde jeltzale, Peru Sainz Vizcaya, ha querido valorar los trabajos realizados en los últimos años. Ha enumerado la sala multiservicio o Gazte Lokala, el inicio de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y la ruta de paseo saludable, “que es ya una realidad”. Asimismo, “se está ultimando un proyecto junto con Gautegiz-Arteaga y Obras Públicas de calmado de tráfico en Kanala”, ha asegurado.

De cara al futuro, Goiriena busca optimizar las infraestructuras del pueblo con el acondicionamiento de varias zonas y la mejora de varios servicios. “Queremos dar continuidad a los proyectos que incidan positivamente en la vida cotidiana de los y las vecinas de Sukarrieta, tanto jóvenes como adultos, y planear nuevas inversiones que redunden en la accesibilidad del pueblo y sus zonas comunes”. “Lo que pretendemos en la siguiente legislatura”, ha destacado Goiriena, “es seguir trabajando para que nuestro municipio sea cada día más amable, agradable y limpio”. Según señala, “tenemos algunos proyectos que creemos se pueden realizar en los próximos cuatro años y que repercutirán en la mejora de la calidad de vida de todas las personas que vivimos en Sukarrieta”. De esta manera, como proyecto relevante, la candidata jeltzale avanza que se creará un espacio cubierto público “con el que se podrá seguir disfrutando en la calle también cuando llueve”.

Erruki Goiriena Irastorza, casada y con una hija, es una enamorada de los animales, de la música, de los paseos y de las tertulias que se forman después de las largas comidas con los y las amigas. “La tranquilidad y el sosiego que da Sukarrieta, la cercanía con las personas, las vistas… es algo que no se paga con dinero”, ha asegurado.