La presidenta del Bizkai Buru Batzar, Itxaso Atutxa, ha reiterado hoy que el cumplimiento del Estatuto de Gernika está actualmente en manos del Gobierno español y que el “impulso político” necesario para completar el trabajo técnico ha de venir de su propio presidente, Pedro Sánchez. “Y, más que cualquier otro, lo tendrá que hacer él mismo; cumplir la ley es deber de cualquier partido político y de cualquier Gobierno”, ha manifestado. En el mismo sentido ha reclamado al Gobierno de España “que se comience a trabajar” y “que se adopten decisiones políticas tendentes a superar los posibles problemas técnicos”.

En la primera entrevista ofrecida en este nuevo inicio del curso político, Itxaso Atutxa ha participado en el programa de Euskal Telebista ‘Egun on Euskadi’. En el debate ha lamentado que el Gobierno central siempre utilice la palabra “voluntad”, “pero después ellos mismos confiesan, y Sánchez lo hizo antes del verano en su comparecencia en el Congreso, que el cumplimiento del acuerdo no llega ni al 35%”. “Son plazos establecidos por ellos mismos, de un acuerdo firmado por ellos, con plazos y calendarios propuestos por ellos, y posteriormente aprobado por dos gobiernos… Por lo tanto, en este momento, una vez más, está en sus manos y la voluntad no parece suficiente”, ha evidenciado. “Lo que se necesita es trabajar y después dar un impulso político a ese trabajo, que suele ser muy técnico (mucho más que el de hace 40 años), y  eso lo puede hacer Sánchez. En otras ocasiones se ha hecho y en esta también se tendrá que hacer”, ha afirmado.

La dirigente de EAJ-PNV de Bizkaia ha explicado también que la relación tanto con Sánchez como con numerosos ministerios “es directa y es buena”, pero “luego vemos cómo terminan las cosas: mucha voluntad pero sin resultados”. Según ha recordado, “el cumplimiento de una ley no es un deseo de un partido político, es una obligación. EAJ-PNV no pretende el cumplimiento del Estatuto porque en su día lo defendiera, sino porque es una deuda contraída por el Gobierno Español con este pueblo. Y, sobre todo, porque el propio Partido Socialista aceptó que era una deuda. Por tanto, pongámonos a trabajar y superemos los escollos técnicos que haya, adoptando verdaderas decisiones políticas”, ha concluido.